Quiebra de Carlos II para niños
Se conoce como quiebra de Carlos II a la quiebra de la Hacienda pública del rey Carlos II de España, producida en 1666; y que tras alteraciones monetarias y fiscales, condujo entre 1680 y 1686 a la reforma monetaria de Carlos II.
Las dificultades hacendísticas heredadas (el reinado anterior había recurrido a la quiebra cuatro veces) obligó a la suspensión de pagos en 1666. La acumulación de débitos e imposibilidad de cancelarlos llevaba periódicamente a decretar la bancarrota, reconvirtiendo la deuda flotante en deuda consolidada o juros. Esta fue la última vez que se recurrió a tal expediente, quedando los réditos de los juros en casi diez millones de ducados en 1669, mientras que el valor de las recaudaciones era de menos de doce millones. A partir de entonces, se generalizó la práctica de detraer entre un 50 y un 70 por ciento de los intereses que debían percibirse por los juros. Otro recurso, la alteración monetaria o premio de la plata, alcanzó un máximo del 275 por ciento en 1679. La inflación consiguiente y la penosa situación de la hacienda habían llegado a un extremo insostenible; de modo que sólo pudo recurrirse a una expeditiva reforma monetaria, llevada a cabo entre 1680 y 1686 (gobierno del Duque de Medinaceli). A partir de entonces los precios se estabilizaron, el valor de la moneda de plata castellana se equiparó al de sus equivalentes europeos, y mejoraron las finanzas tanto de la Hacienda como de los particulares, si bien partiendo de un nivel enormemente precario.
Véase también
- Quiebras de Felipe II
- Quiebras de Felipe III
- Quiebras de Felipe IV
- Historia económica de España
- Crisis de deuda