Su Majestad el rey para niños

Su Majestad el rey es una escultura especial creada por Joan Miró en 1974. Hoy en día, puedes verla en la colección permanente de la Fundación Joan Miró en Barcelona. Es una de las obras donde Miró usó objetos cotidianos para crear algo nuevo y sorprendente.

¿Quién fue Joan Miró?

Joan Miró fue un artista muy famoso nacido en España. Vivió muchos años y vio grandes cambios en su país. Miró creía que los artistas tienen una voz importante. En 1979, cuando recibió un reconocimiento especial de la Universidad de Barcelona, dijo que un artista debe usar su voz para decir algo útil y ayudar a las personas.

¿Qué es Su Majestad el rey?

Su Majestad el rey es una escultura-objeto. Esto significa que Miró la hizo usando cosas que encontró, no materiales tradicionales como mármol o bronce. Esta obra forma parte de un grupo de tres esculturas, junto con Su Majestad la reina y Su Alteza el príncipe. Es interesante cómo Miró usó objetos de la vida diaria para representar figuras tan importantes como un rey.

¿Cómo está hecha la escultura?

La escultura Su Majestad el rey está hecha con un palo oxidado y un trozo de madera que antes era parte de un molino. Miró pintó la madera con colores azul y amarillo, que parecen gotear por los bordes. También añadió una pieza delgada de bronce con un ojo negro pintado que cuelga en la parte delantera. Estos detalles le dan un aspecto único y misterioso.

¿Por qué Miró usaba objetos encontrados?

Joan Miró se inspiraba mucho en su entorno, tanto en la naturaleza como en las cosas que veía a diario. Le gustaba usar objetos sencillos, a menudo relacionados con el campo, para sus esculturas. Para él, estos objetos tenían una energía especial. No los elegía solo por su belleza, sino por lo que sentía que transmitían. Transformaba cosas comunes en obras de arte que hablaban de su conexión con la tierra y el mundo que lo rodeaba.

Miró sentía una fuerte conexión con su tierra natal. Decía que era importante "escuchar el grito de la tierra". Lugares como Mont-roig, donde pasaba tiempo, y Mallorca, donde encontraba poesía y luz, eran muy importantes para su creatividad. Creía que estos lugares le daban la fuerza y la inspiración para crear sus obras.