Sacer para niños
El término sacer es una palabra en latín que usaban los antiguos romanos. En su religión, significaba algo que estaba dedicado o reservado para una divinidad (un dios o diosa). También podía significar algo que era muy respetado o, a veces, algo que había sido afectado de forma negativa por una divinidad.
La palabra sacer viene de una raíz muy antigua, "sak", que significaba "hacer algo sagrado" o "hacer un acuerdo". Es parecida a palabras en otros idiomas antiguos como el griego "hagios" o el hebreo "qadosh", que también se refieren a lo sagrado.
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¿Qué significaba "sacer" para los romanos?
Para los romanos, sacer tenía dos significados principales:
- Algo dedicado a los dioses: Podía ser un objeto, un lugar o incluso una persona que había sido ofrecida o consagrada a los dioses. Una vez que algo era sacer, las personas no podían usarlo para sus propios fines ni reclamarlo. Era como si perteneciera a los dioses.
- Algo afectado por los dioses: A veces, sacer se usaba para describir algo que había sido maldecido o afectado de forma negativa por una divinidad. Aun así, seguía siendo especial y no se podía tratar como algo común.
El escritor romano Varrón decía que sacer también se relacionaba con la "perfección" y la "pureza". Por eso, algo sacer era considerado intocable y muy importante.
¿Qué era lo opuesto a "sacer"?
Lo contrario de sacer era profanum. Esta palabra significaba literalmente "delante (o fuera) del santuario". Se refería a todo lo que no estaba dentro de un lugar sagrado y, por lo tanto, no pertenecía a los dioses. Era lo común y lo que las personas podían usar en su vida diaria.
Algo podía pasar de ser profanum a sacer (consagrarse) o de sacer a profanum (dejar de ser sagrado). Esto solo se podía hacer a través de ceremonias especiales llamadas resecratio, que eran realizadas por un pontífice (un sacerdote importante) en nombre del Estado romano.
Por ejemplo, en el año 217 a.C., durante una promesa llamada ver sacrum, se dedicaron animales a los dioses como sacer. Pero si esos animales morían de forma natural o eran robados antes de ser sacrificados, volvían a ser profanum.
Es importante saber que si algo ya era propiedad de los dioses o estaba marcado por ellos como divino, se le llamaba religiosus. A estas cosas no se les podía ofrecer ni hacerlas sacer, porque ya eran sagradas por sí mismas.
¿Qué pasaba con las personas declaradas "sacer"?
En la ley romana, si una persona era declarada sacer, significaba que estaba fuera de la protección de las leyes normales. Su vida, su familia y sus bienes podían ser tomados por los dioses.
Una persona podía ser declarada sacer si:
- Dañaba a un tribuno de la plebe (un representante del pueblo).
- No podía dar testimonio legalmente.
- No cumplía sus deberes con sus clientes (personas a las que protegía o ayudaba).
- Movía ilegalmente los mojones (piedras que marcaban los límites de los campos).
A una persona declarada homo sacer (hombre sagrado) se le podía matar sin castigo, porque se consideraba que ya no estaba bajo la protección de las leyes humanas, sino que pertenecía a los dioses.
Días sagrados y días comunes
Los romanos también tenían dies sacri ("días sagrados"). Estos días eran nefasti, lo que significaba que las actividades diarias normales que se hacían en los dies profani (o fasti) estaban prohibidas. Eran días dedicados a los dioses y a las ceremonias religiosas.
¿Cómo se relaciona "sacer" con otras palabras?
El concepto de sacer era muy importante en las religiones de Roma y de otras culturas cercanas. En el idioma osco, que era parecido al latín, se usaban palabras como sakoro ("sagrado") y sakrim ("víctima para un sacrificio").
La palabra osca sakaraklum es similar al latín sacellum, que significa un pequeño santuario. Y sakarater en osco es como sacratur o consecrare en latín, que significan "consagrado".
Un sacerdos era "el que realiza una acción sagrada" o "hace que algo sea sagrado", es decir, un sacerdote.
Véase también
En inglés: Homo sacer Facts for Kids