Nuestra Señora del Prado (Talavera de la Reina) para niños
La Virgen del Prado es la patrona de Talavera de la Reina, una ciudad en España. Su fiesta se celebra cada año el 8 de septiembre.
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Historia de la imagen
No se sabe con exactitud cuándo comenzó la devoción a esta imagen en Talavera de la Reina. Sin embargo, es una de las figuras más antiguas de la archidiócesis de Toledo. Una historia popular dice que fue un regalo del rey Liuva en el siglo VII.
Otra creencia es que fue un obsequio de San Ildefonso a Talavera. Se dice que San Ildefonso visitó la Virgen del Prado varias veces en Talavera de la Reina.
Descripción de la imagen
La imagen de la Virgen es una escultura de madera que mide veinticinco centímetros. Está vestida con un manto.
Es una obra de estilo bizantino del siglo X. La figura de María lleva una túnica y tiene al niño sentado en su pierna izquierda, también vestido. En 1943, el artista Ruiz de Luna restauró la imagen, creando los rostros de la Virgen y el Niño que vemos hoy, ya que los originales estaban muy dañados.
Celebraciones y tradiciones
La fiesta de Nuestra Señora del Prado se celebra el 8 de septiembre. Esta fecha está relacionada con una antigua tradición llamada "Mondas". Las Mondas eran fiestas importantes, abiertas a toda la región, y su origen es muy antiguo. Con el tiempo, estas celebraciones se unieron al culto de la Virgen del Prado, probablemente entre los siglos IV y V.
Una tradición especial es que los niños nacidos en Talavera son pasados bajo el manto de la imagen. Esto se hace para pedir su protección, y ocurre el 8 de septiembre y el 31 de diciembre. También se celebran los "mayos" y una novena (nueve días de oraciones) en honor a la Virgen del Prado.
El templo y su reconocimiento
El rey Felipe II llamó a la ermita de la Virgen del Prado "Reina de las Ermitas". El Cardenal Quiroga la llamó "Madre de las Ermitas". La ermita ha sido restaurada varias veces, la primera en 1210 y la última en 1979.
El 15 de julio de 1956, el Pío XII autorizó la Coronación Canónica de la imagen, un reconocimiento especial. Esta ceremonia se llevó a cabo el 30 de mayo de 1957. El 14 de febrero de 1989, el papa Juan Pablo II decidió elevar la ermita a la categoría de Basílica Menor. Fue consagrada como tal el 5 de noviembre de ese mismo año.
