Gato de granja para niños
Un gato de granja es un gato doméstico que vive libremente en una granja, a menudo en grupos llamados colonias. Estos gatos viven al aire libre y buscan refugio en los edificios de la granja. Aunque a veces se les da comida, su principal función es ayudar a controlar los roedores, como ratones y topillos, que pueden dañar los cultivos o los alimentos almacenados.
Los gatos de granja cazan animales pequeños como conejos, roedores, musarañas, reptiles y aves que viven en la granja o en los campos cercanos.
En lugares como Inglaterra, es común encontrar colonias de gatos de granja en la mayoría de las fincas, y pueden tener hasta 30 gatos. Las gatas de granja a veces cuidan juntas a sus crías, compartiendo un mismo nido.
Algunas organizaciones de rescate de animales tienen programas especiales donde entregan gatos que han sido esterilizados (para que no tengan más crías) a personas que necesitan gatos de granja.
La idea de usar gatos para controlar roedores es muy antigua. Se cree que esta necesidad fue una de las razones por las que los gatos fueron domesticados hace miles de años. Aunque los gatos siguen siendo útiles para este propósito en granjas y ranchos, algunos estudios muestran que no siempre son suficientes por sí solos para controlar grandes cantidades de roedores, especialmente ratas. Sin embargo, los gatos pueden ayudar a mantener a los ratones alejados de ciertos lugares, ya que su presencia los asusta.
Contenido
Historia de los gatos de granja
La historia nos dice que los gatos empezaron a vivir con los humanos hace unos 7500 años antes de Cristo. Esto ocurrió porque las personas necesitaban proteger sus reservas de granos de las plagas de roedores. Los gatos eran perfectos para esta tarea, y así comenzó su relación con nosotros.
La vida de los gatos de granja hoy en día
Los gatos de granja viven en diferentes tipos de situaciones. Algunos son muy salvajes y tienen muy poco contacto con las personas. No reciben atención veterinaria y solo se alimentan de lo que cazan. Otros, en cambio, reciben alimentos para gatos de forma regular y visitas al veterinario. A veces, la gente cree que si los gatos están bien alimentados, no cazarán, pero esto no es cierto. De hecho, algunos estudios han demostrado que darles comida puede hacer que los gatos sean aún mejores cazadores.
Vivir al aire libre tiene sus riesgos para los gatos de granja. Los animales que cazan pueden transmitirles parásitos y enfermedades. También pueden sufrir accidentes o ser atropellados por vehículos. Además, otros animales como mapaches, búhos, coyotes y zorros pueden cazar a los gatos y a sus crías.
Los gatos de granja pueden llegar a las fincas de varias maneras. A veces, gatos abandonados o perdidos se quedan en un lugar donde hay mucha comida (roedores). En otros casos, los dueños de las granjas liberan gatos a propósito. Algunos refugios de animales tienen programas especiales que reubican gatos esterilizados en graneros, almacenes o tiendas. Estos programas son cada vez más populares en ciudades donde hay muchos problemas con las ratas, como Chicago.
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Véase también
En inglés: Farm cat Facts for Kids