Competencia perfecta para niños
La competencia perfecta es una situación ideal en un mercado donde muchas empresas venden productos muy parecidos y ninguna de ellas puede decidir el precio por sí sola. En este tipo de mercado, el precio se establece por la interacción de la oferta y demanda, es decir, por la cantidad de productos que los vendedores quieren ofrecer y la cantidad que los compradores quieren adquirir.
En un mercado de competencia perfecta, hay muchísimos compradores y vendedores. Esto significa que la decisión de una sola persona o empresa no afecta el precio general del producto. Es como si todos fueran "aceptadores de precios", porque el mercado ya los ha fijado.
Aunque la competencia perfecta es un modelo teórico, es decir, una idea que no se ve exactamente así en la realidad, nos ayuda a entender cómo funcionan los mercados. Algunos economistas, como Léon Walras, pensaban que este tipo de mercado era justo porque permitía a cada persona buscar su propio beneficio sin aprovecharse de los demás. Los economistas usan este modelo como una base para comparar y analizar otros tipos de mercados y problemas económicos.
Contenido
¿Qué condiciones debe tener un mercado para ser de competencia perfecta?
Para que un mercado se considere de competencia perfecta, deben cumplirse varias condiciones al mismo tiempo. Estas condiciones son ideales y rara vez se dan todas juntas en la vida real.
Muchos compradores y vendedores
En este tipo de mercado, hay un número muy grande de productores (vendedores) y consumidores (compradores). Como hay tantos, ningún vendedor o comprador tiene el poder de influir en el precio del producto. Son como pequeñas piezas en un gran rompecabezas, donde la acción de una sola pieza no cambia el dibujo completo. Por eso se les llama "precio aceptantes".
Productos muy parecidos (homogéneos)
Todas las empresas venden un producto que es prácticamente idéntico. Esto significa que para el comprador, no hay diferencia entre el producto de una empresa y el de otra. Por ejemplo, si todas las manzanas fueran exactamente iguales, no importarían de qué frutería las compraras. Si existieran diferentes marcas con características únicas, este principio no se cumpliría.
Información completa y transparente
Tanto los vendedores como los compradores tienen acceso a toda la información importante sobre el mercado. Saben los precios, las cantidades disponibles y las características de los productos. Esta información es gratuita y está disponible para todos, lo que permite a los compradores comparar fácilmente y tomar las mejores decisiones.
Libertad para entrar y salir del mercado
No existen obstáculos o "barreras" que impidan a nuevas empresas entrar al mercado o a las empresas existentes salir de él. Si una empresa no está ganando dinero, puede dejar de producir ese bien y dedicarse a otra cosa. De la misma manera, si un mercado es muy rentable, nuevas empresas pueden entrar fácilmente para aprovechar esa oportunidad.
Movilidad de bienes y recursos
Los productos y los recursos necesarios para producirlos (como el trabajo o el capital) pueden moverse libremente y sin costos significativos. Esto significa que los costos de transporte son muy bajos o inexistentes, y los consumidores pueden comprar el producto de cualquier vendedor con la misma facilidad.
Sin costos adicionales al comprar o vender
No hay costos extra asociados a la compra o venta de los productos. Esto significa que ni los compradores ni las empresas tienen que pagar tarifas adicionales o incurrir en gastos ocultos al realizar una transacción. Así, la elección de una empresa sobre otra se basa únicamente en el producto y el precio, no en costos adicionales.
La idea principal de la competencia perfecta no es tanto la rivalidad entre empresas, sino que el poder de controlar el mercado está muy repartido entre todos los participantes. Cuanto más repartido esté este poder, menos posibilidades hay de que alguien manipule la cantidad de productos o sus precios.
¿Es la competencia perfecta algo real?
Las condiciones que acabamos de ver son muy estrictas y es muy difícil que un mercado las cumpla todas en la realidad. Por ejemplo, pocos productos son exactamente iguales entre diferentes vendedores, y casi siempre hay alguna barrera para que nuevas empresas entren a un mercado.
Sin embargo, el modelo de competencia perfecta es muy útil. Aunque no sea una descripción exacta de la realidad, nos ayuda a entender cómo funcionan algunos mercados que se parecen mucho a este modelo, como ciertos productos agrícolas o algunos mercados financieros. Además, es una herramienta importante para predecir cómo se comportarán los precios y las cantidades en mercados que se aproximan a la competencia perfecta.
En los mercados que se acercan a la competencia perfecta, las empresas que quieren ganar más dinero deben ser muy eficientes. Esto significa que tienen que usar la mejor tecnología disponible y las técnicas de producción más avanzadas. Así, la búsqueda de mayores ganancias lleva a las empresas a ser más eficientes y a modernizarse constantemente.
¿Cómo se logra el equilibrio en un mercado de competencia perfecta?
El equilibrio en un mercado de competencia perfecta se alcanza cuando la cantidad total de productos que los compradores quieren adquirir (la demanda del mercado) es igual a la cantidad total de productos que los vendedores quieren ofrecer (la oferta de la industria). Es el punto donde la oferta y la demanda se encuentran y el precio se estabiliza.
Existen diferentes plazos para entender este equilibrio:
- Muy corto plazo: En este periodo, la cantidad de recursos usados para producir (como la tierra, el trabajo y el capital) y el número de empresas en la industria no pueden cambiar. La producción es fija.
- Corto plazo: Aquí, el factor trabajo puede variar, lo que permite a las empresas ajustar un poco su producción.
- Mediano plazo: Las empresas pueden reorganizar sus recursos productivos, cambiando las cantidades de cada factor que utilizan, pero el número de empresas en la industria sigue siendo el mismo.
- Largo plazo: En este periodo, no solo los recursos pueden reasignarse libremente, sino que también el número de empresas en la industria puede cambiar. Si hay muchas ganancias, nuevas empresas entrarán; si hay pérdidas, algunas saldrán.
Un resultado muy importante del equilibrio a largo plazo es que, debido a la libre competencia y la facilidad para que nuevas empresas entren, el precio de un producto en competencia perfecta será igual al costo mínimo posible para producirlo. Esto significa que las empresas no obtendrán ganancias extraordinarias, solo las suficientes para cubrir todos sus costos, incluyendo el costo de oportunidad de su capital (lo que podrían haber ganado invirtiendo en otra cosa). Si una industria tuviera ganancias muy altas, esto atraería a nuevas empresas, lo que aumentaría la oferta y haría que el precio bajara hasta que las ganancias volvieran a ser "normales" (cero ganancias extraordinarias).
Véase también
En inglés: Perfect competition Facts for Kids