Círculo de habitación talayótico para niños
Los círculos de habitación talayóticos son un tipo especial de vivienda que se usaba al final de la época Talayótica. Estas casas son únicas de la isla de Menorca y se empezaron a construir alrededor del año 600 o 500 antes de Cristo, durante la segunda Edad del Hierro. Son las construcciones más estudiadas y conocidas de la prehistoria de Menorca. Su nombre viene de su forma circular y fue usado por primera vez por Maria Lluïsa Serra Belabre.
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Los Círculos de Habitación Talayóticos: Casas Antiguas de Menorca
¿Quién Descubrió Estas Casas Antiguas?
Los primeros círculos talayóticos fueron excavados en 1916 por A. Vives Escudero y F. Hernández Sanz. Aunque los resultados de su trabajo no se publicaron, el hijo de F. Hernández Sanz, J. Hernández Mora, mencionó en 1943 que las estructuras que su padre había excavado podían ser casas de la época Talayótica.
Más tarde, en la década de 1960, Maria Lluïsa Serra excavó en lugares como Torelló y Sant Vicents d'Alcaidus. Allí encontró varias estructuras que describió como casas y a las que llamó "círculos". A principios del siglo XXI, un grupo llamado Amics del Museu de Menorca ha estado excavando algunas de estas estructuras en Torre d'en Galmés.
¿Cómo Eran las Casas Talayóticas por Dentro y por Fuera?
Estas construcciones son de tipo ciclópeo, lo que significa que están hechas con piedras muy grandes. Se caracterizan por su forma circular, aunque algunas pueden ser un poco más cuadradas. Sus paredes son dobles, con dos capas de piedras.
Las paredes exteriores e interiores eran diferentes. Por fuera, la primera fila de piedras planas se apoyaba en la roca del suelo. Encima, se colocaban grandes losas verticales y luego filas de piedras más pequeñas hasta el techo. Por dentro, la pared estaba hecha con piedras de tamaño mediano colocadas en líneas horizontales. Entre estas dos capas de pared, había pilares que, junto con otros pilares alrededor del patio, ayudaban a sostener el techo de las habitaciones.
El Patio Central
La casa se organizaba alrededor de un patio central que no tenía techo. Este patio estaba rodeado por cinco pilares. En el patio, había un espacio circular que se usaba como cocina. En algunos casos, también se encontraba un pequeño silo, que probablemente servía para recoger agua.
Las Habitaciones Interiores
Para entrar a la casa, se pasaba por un pasillo que llevaba al patio. En este pasillo, a menudo había dos pequeñas habitaciones cuya función no está clara.
Una vez dentro del patio, hacia el norte, se encontraba la habitación más grande. Se entraba a ella por una puerta con un dintel (una viga horizontal sobre la puerta). Parece que esta era la habitación donde descansaban los habitantes. Tenía un suelo más elevado, hecho de tierra apisonada, diferente al de las otras habitaciones. En algunos círculos, se ha encontrado una especie de brasero en esta zona.
Hacia el oeste, casi siempre había dos habitaciones que podrían haberse usado para guardar diferentes cosas o para fabricar objetos. La zona este de la casa es la que más varía en los descubrimientos arqueológicos, pero generalmente tiene dos habitaciones juntas.
El techo de la casa seguramente estaba hecho con un armazón de vigas de madera que se apoyaban en los pilares. Encima de esto, habría una cubierta de arcilla, piedras y una capa de plantas.
El Patio Exterior: Un Espacio para Actividades
Gracias a los trabajos arqueológicos recientes, se ha descubierto que las casas talayóticas no eran solo el círculo principal, sino que también tenían un patio exterior. En este patio se realizaban muchas actividades diferentes. Actualmente, se han excavado tres de estos patios en Torre d'en Galmés. Lo interesante es que, a diferencia de los círculos, estos patios no seguían un diseño fijo, sino que tenían formas muy variadas.
Estos patios eran grandes espacios al aire libre. En ellos, se encontraban algunas habitaciones que podrían haberse usado para preparar y procesar alimentos, para almacenar cosas o para proteger al ganado. También se ha encontrado en estas áreas lo que se llama una sala hipóstila. Estas son habitaciones anexas a las casas que, aunque su función no está del todo clara, parece que se usaban para almacenar objetos.