Recurso de apelación para niños
El recurso de apelación es una forma de pedir a un tribunal de mayor nivel que revise y, si es necesario, corrija una decisión tomada por un tribunal de menor nivel. Imagina que un árbitro toma una decisión en un partido y uno de los equipos no está de acuerdo. Ese equipo podría pedir a un árbitro principal o a un comité superior que revise la decisión. En el mundo de la justicia, la apelación sirve para corregir posibles errores y para asegurar que las leyes se aplapliquen e interpreten correctamente.
En el sistema judicial, existen diferentes niveles de tribunales, organizados como una escalera. Esto significa que la decisión de un juez o tribunal puede ser revisada por uno que está por encima. Si una de las partes en un caso no está de acuerdo con la decisión de un juez, puede usar el recurso de apelación. Así, un tribunal superior revisará la decisión y, si encuentra algún error, la corregirá.
En el ámbito de la administración pública (por ejemplo, decisiones de un ayuntamiento o una oficina de gobierno), existe algo similar llamado recurso de alzada. Con este recurso, se pide a un funcionario de mayor rango que revise la decisión de un subordinado. También existe el recurso de reposición, que se dirige al mismo funcionario que tomó la decisión para que la reconsidere.
Cuando una decisión judicial ya no puede ser apelada o ha pasado el tiempo para hacerlo, se le llama sentencia firme. Esto significa que la decisión es definitiva.
Contenido
¿Cómo surgieron las apelaciones?
Los sistemas para revisar y corregir decisiones judiciales existen desde hace miles de años.
Primeros sistemas de revisión
En la antigua Babilonia, hace mucho tiempo, el rey Hammurabi y sus gobernadores actuaban como los tribunales de apelación más importantes. En el antiguo derecho romano, ya existía el derecho a apelar decisiones desde el año 509 antes de Cristo. Más tarde, los romanos desarrollaron un sistema complejo con varios niveles de tribunales de apelación, donde incluso el emperador podía escuchar algunas apelaciones. En Japón, los tribunales de apelación también existieron desde al menos el shogunato Kamakura (entre los años 1185 y 1333), con un tribunal especial llamado hikitsuke para ayudar a resolver disputas.
La evolución en el derecho moderno
Aunque la idea de apelar es muy antigua, el derecho a apelar tal como lo conocemos hoy es más reciente en algunos sistemas legales, como el "common law" (que se basa en las decisiones de los jueces). En los primeros tribunales de Inglaterra, no existía una apelación directa de un tribunal a otro. Con el tiempo, se desarrollaron formas de revisión, pero eran limitadas. Debido a la insatisfacción con estos métodos, Inglaterra cambió a un sistema de apelaciones más parecido al actual en casos civiles en 1873 y en casos penales en 1907.
En Estados Unidos, el primer sistema de tribunales federales de apelación se creó en 1789. Sin embargo, el derecho federal a apelar en todos los casos no se estableció hasta finales del siglo XIX. El Congreso creó los tribunales de apelación de Estados Unidos para revisar las decisiones de los tribunales de distrito. Por ejemplo, el Tribunal de Apelaciones de Estados Unidos para el Quinto Circuito revisa casos de Luisiana, Misisipi y Texas.
¿Qué características tiene una apelación?
La apelación tiene varias características importantes:
- Es un recurso común: Esto significa que, por lo general, la ley permite apelar casi todo tipo de decisiones judiciales.
- Permite una revisión completa: El tribunal superior puede revisar todos los detalles del caso, tanto los hechos como la aplicación de la ley. No se limita solo a ver si la ley se aplicó correctamente, como ocurre en otros tipos de recursos.
- Se limita a lo que se pide: Generalmente, el tribunal de apelación solo revisa lo que las partes le piden. Si solo una parte apela, el tribunal no puede empeorar la situación de esa parte. Por eso, a veces ambas partes apelan para que el tribunal tenga más libertad para revisar el caso.
- Se presenta ante el mismo tribunal: Aunque la apelación la resuelve un tribunal superior, se presenta inicialmente ante el mismo tribunal que dictó la decisión que se quiere revisar.
¿Por qué es importante la apelación?
El recurso de apelación es muy importante porque se considera parte del derecho a una justicia efectiva. Esto significa que todas las personas tienen derecho a que sus casos sean escuchados y resueltos de manera justa. El Tribunal Europeo de Derechos Humanos, por ejemplo, ha dicho que se viola este derecho si una persona acusada en un juicio penal no tiene la posibilidad de apelar su condena.
Es útil diferenciar la apelación de otros tipos de recursos:
- Recurso de alzada: Es el equivalente de la apelación en el ámbito administrativo (gobierno).
- Recurso de casación: Lo revisa un tribunal superior, como un Tribunal Supremo, y es más limitado que la apelación, enfocándose solo en la correcta aplicación de la ley.
- Recurso de queja o reposición: Se presenta ante el mismo tribunal que tomó la decisión para que la revise. Se usa para decisiones específicas o cuando el tribunal superior es el que dictó la primera decisión.
- Recurso de amparo: Se presenta ante un tribunal superior, como un Tribunal Constitucional, cuando se considera que se han violado derechos fundamentales de una persona.
El proceso de apelación en España
En España, el proceso de apelación sigue unos pasos específicos:
- Presentación: El recurso se presenta ante el mismo tribunal que dictó la decisión que se quiere impugnar. Hay un plazo de veinte días desde que se notifica la decisión.
- Argumentos: En el recurso, se deben explicar las razones por las que se está en desacuerdo con la decisión, tanto si son errores de hecho como de derecho.
- Pruebas: Se pueden presentar nuevas pruebas si se cumplen ciertas condiciones.
- Admisión: Un funcionario del tribunal revisa si el recurso cumple con los requisitos. Si no, se puede pedir al juez que decida si se admite o no.
- Traslado a la otra parte: Una vez admitido, se informa a la otra parte, que puede oponerse al recurso o incluso presentar su propia apelación.
- Envío al tribunal superior: Cuando todos los trámites iniciales se han completado, el caso se envía al tribunal superior (generalmente una Audiencia Provincial). Las partes tienen un plazo para presentarse ante este nuevo tribunal. Si la parte que apeló no se presenta, se considera que ha desistido del recurso.
- Decisión final: Si se propusieron nuevas pruebas, el tribunal superior decidirá si las admite y, si es necesario, fijará una fecha para una audiencia. Finalmente, el tribunal superior dictará una nueva decisión, que puede modificar, revocar (anular) o confirmar la decisión original.
Apelaciones en otros países
El recurso de apelación existe en muchos países, con algunas diferencias en sus reglas:
Canadá
En Canadá, las reglas para las apelaciones en casos penales están en el Código Penal. Para los casos civiles en Quebec, las reglas se encuentran en el Código de Procedimiento Civil de Quebec.
Francia
En Francia, la apelación es un recurso común que permite que un caso sea revisado por jueces con más experiencia. El caso se vuelve a juzgar completamente, tanto en los hechos como en la aplicación de la ley. Sin embargo, no todos los casos pueden ser apelados; por ejemplo, en casos civiles, el valor del asunto en disputa debe superar los 5.000 euros.
Suiza
En Suiza, la apelación es la forma principal de impugnar una decisión de primera instancia ante un tribunal cantonal. El tribunal de segunda instancia puede revisar el caso por completo, tanto los hechos como el derecho. La apelación detiene el proceso en curso y el tribunal de primera instancia pierde su competencia. El tribunal de apelación toma una nueva decisión que reemplaza a la primera. Para que proceda una apelación, la decisión debe ser definitiva y, si es un caso de dinero, el valor en disputa debe ser de al menos 10.000 francos suizos.
Chile
En Chile, la apelación es un medio para que una parte que se siente perjudicada por una decisión judicial pida al tribunal que la dictó que envíe el caso a un tribunal superior. Este tribunal superior revisará la decisión para corregirla si es necesario.
Adhesión a la apelación
La "adhesión a la apelación" es una opción que tiene la parte que no apeló inicialmente. Si la sentencia no le fue completamente favorable, puede pedir que se revise la parte que le perjudica. Es como si presentara su propia apelación, pero ligada a la apelación principal. Para que esto ocurra, debe haber una apelación principal pendiente, la sentencia debe perjudicar a la parte que se adhiere, y debe hacerlo dentro de los plazos y formas legales.
¿Cómo termina una apelación?
Una apelación puede terminar de varias maneras:
- Forma normal: La forma más común es cuando el tribunal superior dicta su resolución. Puede modificar (cambiar), revocar (anular y reemplazar por otra) o confirmar (ratificar) la decisión original.
- Formas anormales: Son aquellas en las que la apelación termina antes de que el tribunal superior se pronuncie sobre el fondo del asunto. Por ejemplo, el desistimiento, que es cuando la parte que apeló renuncia expresamente a su recurso.
- Formas indirectas: Son situaciones que ponen fin al proceso judicial en general, y por lo tanto, también a la apelación. Incluyen el abandono del procedimiento (cuando nadie actúa en el caso por mucho tiempo), el desistimiento de la demanda (cuando el demandante retira su petición), o acuerdos entre las partes como la transacción o la conciliación.
Galería de imágenes
Véase también
En inglés: Appeal Facts for Kids