Racionamiento para niños
El racionamiento es una medida que toman los gobiernos para distribuir de forma controlada los productos y recursos que son escasos. Esto suele ocurrir en momentos difíciles, como durante guerras, épocas de escasez de alimentos o cualquier otra situación de emergencia en un país.
Cuando hay racionamiento, se limita la cantidad de un producto que cada persona puede comprar. Por ejemplo, se prohíbe usar ciertos productos para cosas menos importantes, y se prioriza su uso para actividades esenciales. Si un producto es muy escaso, se distribuye en cantidades muy pequeñas para que todos puedan tener un poco. También puede haber racionamiento basado en el costo, donde se limita cuánto dinero pueden gastar las personas en productos básicos que son difíciles de medir, como la ropa.
A veces, se usan "puntos" o "cupones" para el racionamiento. A cada producto se le asigna un valor en puntos, y a cada persona se le dan cupones con una cierta cantidad de puntos, como si fuera dinero, para que los intercambie por los productos racionados.
En una situación así, las personas suelen ahorrar su dinero o invertirlo en bonos del gobierno. De esta manera, el dinero que no se gasta no se usa para comprar cosas innecesarias o en ventas no oficiales.
Contenido
Racionamiento: ¿Qué es y por qué ocurre?
El racionamiento es una forma en que un gobierno controla la distribución de bienes y servicios cuando hay muy pocos para todos. Esto se hace para asegurar que las personas puedan acceder a lo más básico, especialmente en momentos de crisis.
¿Cómo funciona el racionamiento?
Cuando un país implementa el racionamiento, significa que no hay suficientes productos para satisfacer a toda la población. Para que la distribución sea más justa, el gobierno decide cuánto de cada producto puede comprar cada persona o familia.
Tipos de racionamiento
Existen diferentes maneras de racionar:
- Por cantidad: Se limita la cantidad de un producto que se puede comprar, por ejemplo, un kilo de arroz por persona al mes.
- Por uso: Se prohíbe usar ciertos productos para fines no esenciales.
- Por costo: Se limita el dinero que se puede gastar en productos difíciles de estandarizar, como la ropa.
- Por puntos o cupones: Se entregan cupones a las personas, que funcionan como dinero especial para comprar productos racionados. Cada producto tiene un valor en puntos.
El racionamiento en la historia de España
El racionamiento se implementó por primera vez en España durante la Guerra Civil. El gobierno de ese momento, liderado por Francisco Largo Caballero, estableció esta medida en marzo de 1937 para distribuir los alimentos disponibles durante el conflicto. Se creó una "tarjeta de racionamiento familiar" para cada municipio.
La Guerra Civil y la posguerra
Después de la Guerra Civil, España vivió un periodo de mucha escasez. En mayo de 1939, se estableció un sistema de racionamiento para los alimentos básicos y productos de primera necesidad. Sin embargo, las cantidades racionadas no eran suficientes para cubrir las necesidades de la población, lo que llevó a años de dificultades. Asegurarse la comida diaria se convirtió en un gran desafío.
La vida diaria con cartillas de racionamiento
Se usaban dos tipos de cartillas de racionamiento: una para la carne y otra para el resto de los alimentos. La población se dividía en grupos para asignar las raciones: hombres adultos, mujeres adultas (con una ración del 80% de la de los hombres), niños y niñas hasta catorce años (con una ración del 60%), y personas mayores de sesenta años (con una ración del 80%). La cantidad de productos también podía variar según el tipo de trabajo del jefe de familia.
Al principio, las cartillas eran para toda la familia, pero en 1943 se hicieron individuales para tener un control más preciso de la población. En mayo de 1943, había más de 27 millones de personas racionadas en España.
Desafíos y el fin del racionamiento en España
La distribución de alimentos racionados a menudo se caracterizaba por la baja calidad de los productos. Además, existía la venta de productos por fuera del control oficial, donde los precios eran mucho más altos. Por ejemplo, un kilo de azúcar que costaba 1,90 pesetas de forma oficial, podía costar 20 pesetas en la venta no oficial. El aceite oficial costaba 3,75 pesetas el litro, y 30 pesetas en la venta no oficial.
El racionamiento oficial en España terminó en mayo de 1952 para los productos alimenticios. Durante los años 40, la falta de alimentos y la mala higiene causaron problemas de salud en la población. En algunas provincias, como Jaén en 1942, la falta de nutrición llevó a que muchos niños fallecieran.
El racionamiento en América Latina
El racionamiento también se ha implementado en varios países de América Latina en diferentes momentos.
Ejemplos en Cuba, Chile y Venezuela
- Cuba: En marzo de 1962, se creó la "Libreta de Abastecimiento", que es un sistema para racionar productos básicos en la isla. Este sistema sigue funcionando hoy en día y es administrado por la Oficina de Control de Distribución de Alimentos (OFICODA).
- Chile: Durante el gobierno de Salvador Allende en 1972, se crearon las Juntas de Abastecimiento y Control de Precios (JAP). Su objetivo era enfrentar la escasez de productos que llevó a una crisis económica en 1973. Estos comités de racionamiento se disolvieron después de un cambio de gobierno.
- Venezuela: En 2016, el gobierno de Nicolás Maduro anunció la creación de los Comités Locales de Abastecimiento y Producción (CLAP). Esta medida buscaba ayudar a la población frente a la escasez de productos en el país.
Véase también
En inglés: Rationing Facts for Kids
- Cartilla de racionamiento
- Economía de España durante el período de autarquía
- Racionamiento en Reino Unido durante la Segunda Guerra Mundial
- Racionamiento en Cuba