robot de la enciclopedia para niños

Fósforo (utensilio) para niños

Enciclopedia para niños

Un fósforo, también conocido como cerilla o cerillo, es una herramienta pequeña que nos permite encender fuego de forma rápida. Consiste en una varilla de material que se quema fácilmente, con una punta especial llamada cabeza. Cuando frotamos esta cabeza contra una superficie áspera, el calor de la fricción hace que la punta se encienda.

El fósforo es un invento muy importante en la historia, ya que permitió a los seres humanos obtener fuego al instante, lo que cambió muchas cosas en su vida diaria.

¿Cómo funciona un fósforo?

El secreto para encender un fósforo es lograr que la cabeza alcance una temperatura muy alta, llamada temperatura de ignición. Esto se consigue frotando la cabeza, lo que genera calor. Este calor provoca una reacción química que hace que el material de la cabeza se prenda. La llama dura poco tiempo en la cabeza, pero luego se mantiene en la varilla que la sostiene.

Los fósforos se clasifican según de qué están hechas sus partes: la cabeza (la parte que se enciende) y el soporte o vástago (la varilla).

Tipos de cabezas de fósforo

Los fósforos modernos tienen dos tipos principales de cabezas:

  • Integrales (a veces llamados lucifer): Estos fósforos se encienden al frotarlos contra casi cualquier superficie rugosa. Su cabeza contiene un compuesto de fósforo, de ahí su nombre.
  • De seguridad: Estos solo se encienden si los frotas contra una superficie especial que viene en su caja. Esta superficie es la que contiene el fósforo. Así se evita que los fósforos se enciendan por accidente si se frotan entre sí dentro de la caja.

Tipos de soportes de fósforo

La cabeza del fósforo necesita un soporte para que podamos manejarlo. A lo largo del tiempo, se han usado diferentes materiales para estos soportes:

  • Lo más común es un palito de madera con forma cuadrada.
  • Antiguamente, se usaban hilos de algodón o papel doblado cubiertos con cera (por eso se les llama "cerillas").
  • También se ha usado cartón empapado, especialmente en los fósforos que vienen en forma de librito, llamados "de carterilla".

Algunos fósforos son más largos de lo normal. Estos fósforos "extragrandes" son útiles para encender fuegos que tardan un poco en prender, como los de una chimenea o una barbacoa. También son más seguros para quienes están aprendiendo a usarlos, porque al ser más largos, mantienen los dedos lejos de la llama.

Historia del fósforo

Archivo:SuperDeportistas
Carterilla de cerillas «Super Deportistas» de México (mediados del s. XX), de la colección permanente del Museo del Objeto del Objeto (MODO)

Primeros intentos

En China, ya se usaban palitos de pino con azufre para encender fuego desde hace más de mil años (siglo X). Es posible que viajeros los llevaran a Europa.

En 1669, un alquimista llamado Hennig Brandt descubrió el elemento fósforo. Años después, en 1680, Robert Boyle tuvo la idea de cubrir un trozo de papel con fósforo y la punta de una astilla de madera con azufre. Al frotar la astilla contra el papel, se encendía.

El primer fósforo moderno que se encendía solo fue inventado en París en 1805 por K. Chancel. La cabeza de este fósforo tenía una mezcla de varias sustancias. Se encendía al mojar la punta en un recipiente con ácido. Sin embargo, era muy caro y peligroso, por lo que no se hizo popular.

En 1817, un químico francés mostró una "cerilla etérea". Era una tira de papel con un compuesto de fósforo que ardía al contacto con el aire. Venía en un tubo de cristal sellado al vacío. Para encenderla, había que romper el cristal y usar el fuego rápidamente, ya que solo ardía por unos instantes.

El fósforo de fricción

En 1827, un farmacéutico llamado John Walker estaba en su laboratorio. Al remover una mezcla de químicos con un palito, notó que una gota seca se había pegado al extremo. Para quitarla, la frotó contra el suelo y ¡se encendió! Así se inventó el fósforo de fricción. Walker vendió estos fósforos, pero no los patentó. Otro inventor, Samuel Jones, los patentó y los vendió con el nombre de "lucifers". Estos primeros fósforos tenían algunos problemas: olían mal, la llama no era estable y a veces la reacción era muy fuerte, lanzando chispas.

En 1830, el químico francés Charles Sauria añadió fósforo blanco para mejorar el olor. Sin embargo, el fósforo blanco era muy peligroso para la salud de los trabajadores que los fabricaban, causando enfermedades graves. Esto llevó a una campaña para prohibir su uso.

En 1836, un estudiante de química húngaro, János Irinyi, hizo un cambio importante que hizo que los fósforos ardieran de manera más uniforme y sin tanto olor. Estos se llamaron "cerillas silenciosas".

Debido a los problemas de salud causados por el fósforo blanco, muchos países prohibieron su uso en la fabricación de fósforos a finales del siglo XIX y principios del XX.

Fósforos integrales modernos

En 1898, dos químicos franceses, Savene y Cahen, patentaron un fósforo que usaba una sustancia diferente al fósforo puro, lo que lo hacía menos peligroso y no explosivo. Se podía encender frotándolo contra cualquier superficie rugosa.

Fósforos de seguridad

Los fósforos de seguridad fueron inventados por el sueco Gustaf Erik Pasch en 1844 y mejorados por John Edvard Lundström diez años después.

La clave de su seguridad es que no usan fósforo blanco. En su lugar, la cabeza del fósforo tiene azufre y otra sustancia, mientras que la superficie de la caja donde se frotan contiene fósforo rojo y otras sustancias. Cuando frotas el fósforo, el calor de la fricción hace que el fósforo rojo se transforme y se encienda, iniciando la combustión de la cerilla.

¿Cómo funcionan los fósforos de seguridad?

Para fabricar estos fósforos, los palitos de madera se sumergen en soluciones especiales para que no se quemen demasiado rápido. Luego, se les pone parafina en un extremo para que la cabeza se encienda fácilmente. Finalmente, ese mismo extremo se cubre con una mezcla de sustancias que se queman, otras que ayudan a la fricción (como polvo de vidrio) y colorantes.

La parte de la caja donde se raspa el fósforo contiene polvo de vidrio, fósforo rojo y otras sustancias. Cuando frotas el fósforo, el roce genera calor. Este calor hace que el fósforo rojo de la caja reaccione y libere más calor, lo que a su vez enciende la cabeza del fósforo. La madera del fósforo se calienta y también se enciende, pero la preparación especial de la madera evita que se queme rápidamente por sí sola. En el momento de encenderse, la temperatura puede llegar a ser muy alta.

Seguridad al usar fósforos

Es muy importante usar los fósforos con cuidado para evitar accidentes.

  • Deben guardarse fuera del alcance de los niños pequeños, preferiblemente en lugares seguros y cerrados. Muchos incendios en casas han comenzado porque los niños jugaban con fósforos.
  • No deben usarse cerca de materiales que puedan explotar o prenderse fuego fácilmente.
  • Asegúrate de que el fósforo esté completamente apagado después de usarlo.
  • Nunca uses fósforos si sospechas que hay una fuga de gas.

Véase también

Kids robot.svg En inglés: Match Facts for Kids

Galería de imágenes

kids search engine
Fósforo (utensilio) para Niños. Enciclopedia Kiddle.