Casa de moneda para niños
Una casa de moneda, también conocida como ceca o casa de la moneda, es un lugar especial donde se fabrican y se les da forma a las monedas. Es como una fábrica, pero dedicada exclusivamente a crear el dinero metálico que usamos todos los días.
La historia de las casas de moneda está muy unida a la historia de las monedas. Al principio, las monedas se hacían golpeando el metal con un martillo o fundiéndolo en moldes. Así se producían solo unos pocos cientos o miles de monedas. Hoy en día, en las casas de moneda modernas, se fabrican miles de millones de monedas usando máquinas muy avanzadas.
Contenido
¿Qué es una Casa de Moneda o Ceca?
Una casa de moneda es el lugar donde se producen las monedas. La palabra ceca viene del árabe sikka, que significa "moneda" o "troquel". Un troquel es una pieza de metal duro, generalmente cilíndrica, que tiene el diseño de la moneda grabado en negativo.
¿De dónde viene la palabra "moneda"?
La palabra moneda viene del latín monēta. Este término se usaba para referirse al templo de la diosa Juno Moneta en Roma. En este templo, alrededor del año 269 antes de Cristo, se empezaron a fabricar monedas de plata. Por eso, el nombre de la diosa se asoció con el dinero y con el lugar donde se hacía.
¿Cómo se hacen las monedas?
Para hacer una moneda, se usa un troquel. Este troquel golpea una pieza de metal redonda y lisa, llamada cospel. Al golpearla, el diseño del troquel se imprime en el cospel, dándole forma y relieve. A este proceso se le llama "acuñar".
La Fascinante Historia de las Casas de Moneda
Las casas de moneda han existido desde hace mucho tiempo y han evolucionado con la tecnología.
Las Primeras Monedas y su Fabricación
La primera casa de moneda conocida se estableció en Lidia, una región antigua, en el siglo VII antes de Cristo. Allí se acuñaban monedas de oro, plata y una mezcla de ambos metales llamada electro. La idea de que el Estado fabricara monedas se extendió rápidamente a Grecia, donde muchas ciudades tenían sus propias casas de moneda.
Al mismo tiempo, en China, Corea y Japón también comenzaron a fabricar monedas de forma independiente. En la antigua Roma, la producción de monedas empezó alrededor del siglo IV antes de Cristo. Las casas de moneda romanas se extendieron por todo el Imperio y a veces se usaban para difundir mensajes. Por ejemplo, la gente se enteraba de quién era el nuevo emperador cuando veían monedas con su retrato.
La Tecnología Antigua para Acuñar Monedas
Al principio, hacer monedas era un trabajo artesanal. En la Edad Media, se fundían barras de metal y se golpeaban sobre un yunque para aplanarlas. Luego, se cortaban trozos de estas láminas con tijeras, se colocaban entre dos troqueles y se golpeaban. Después, se volvían a recortar con tijeras para darles la forma final.
Una mejora importante fue el uso de una herramienta parecida a unas tenazas. Los dos troqueles se colocaban en los extremos de las "patas" de las tenazas. Esto hacía que los golpes fueran más precisos y no había que ajustar los troqueles cada vez.
Durante la Edad Media, solo el rey podía autorizar la fabricación de monedas. Las casas de moneda eran pequeños talleres que a veces viajaban con la corte.
La Modernización de la Acuñación
El rey Alfonso VI de León y Castilla fue uno de los primeros en modernizar este proceso en España. Creó dos casas de moneda estables en Toledo y León. Las monedas que se hacían allí se llamaban moneda regis y se fabricaban con una mezcla de plata y cobre, llamada vellón. Con el tiempo, la plata fue reemplazada por otros metales como el acero o el latón.
En 1553, un ingeniero alemán llamado Brücher inventó dos máquinas que cambiaron la forma de hacer monedas:
- El Laminador: Esta máquina, impulsada por un molino, aplanaba los lingotes de metal para obtener láminas de grosor uniforme.
- La Prensa de volante: Usaba la fuerza de un gran volante para estampar las monedas con mucha potencia.
Estas máquinas eran grandes y necesitaban talleres más grandes. En 1830, el ingeniero suizo Jean Pierre Droz inventó el sistema de virola partida. Con este sistema, se podían acuñar las dos caras de la moneda y también el canto (el borde) al mismo tiempo.
Acuñar el canto era muy importante. Antes, las monedas antiguas tenían bordes irregulares. Algunas personas deshonestas recortaban los bordes de las monedas para quedarse con un poco de metal y luego usarlo para hacer nuevas monedas. El canto acuñado evitaba esto.
La Acuñación con Prensa de Tornillo
En 1553, el ingeniero francés Aubin Olivier introdujo las prensas de tornillo para acuñar monedas. Estas prensas también usaban rodillos para aplanar el metal y máquinas para cortar los discos redondos. Al principio, se necesitaban muchos hombres para operar estas máquinas, pero luego se usaron caballos, mulas o la fuerza del agua para moverlas.
Aunque al principio hubo resistencia, este sistema se reintrodujo en Francia en 1640 y la acuñación manual fue prohibida. En Inglaterra, la nueva maquinaria se probó en 1561 y se adoptó definitivamente en 1662.
La Acuñación en la Era Industrial
Las técnicas industriales y la energía de vapor llegaron a la fabricación de monedas gracias a Matthew Boulton en Birmingham en 1788. En ese momento, muchas monedas en Gran Bretaña eran falsas. Matthew Boulton, que ya fabricaba productos de metal, decidió enfocarse en la acuñación.
En 1788, estableció una casa de moneda en su fábrica. Ese mismo año, inventó una prensa de tornillo impulsada por vapor. Esta máquina era tan eficiente que su diseño original se usó en la Casa de Moneda Real de Inglaterra durante casi un siglo, hasta 1881.
Galería de imágenes
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Prensa de volante francesa usada en España en el siglo XIX.
Para saber más
- Troquel: La herramienta que imprime el diseño en las monedas.
- Moneda: El dinero en forma de piezas metálicas.
- Numismática: El estudio y coleccionismo de monedas y medallas.
Véase también
En inglés: Mint (facility) Facts for Kids