Casa de Juan Correcher para niños
La Casa de Juan Correcher es un edificio muy especial que se encuentra en la ciudad de Cuenca, en España. Es un ejemplo de la arquitectura tradicional de la zona y estaba dedicada a las actividades relacionadas con la madera.
Esta casa es importante porque es una de las últimas construcciones grandes que se hicieron usando los métodos antiguos de madera y piedra, antes de que se empezara a usar el cemento y el hierro. Además, es una de las pocas casas de este tipo que aún existen en el centro de una ciudad. Aunque por fuera parece sencilla y modesta, esto se debe a que era una casa de trabajo del siglo XIX y a que ha sido reparada varias veces, lo que cambió un poco su aspecto original.
Contenido
¿Cómo es la Casa de Juan Correcher?
La fachada y su diseño
La parte principal de la casa, la fachada, tiene dos ventanas grandes y una puerta principal en la planta baja. En el piso de arriba, hay tres balcones.
Materiales y construcción tradicional
La casa fue construida usando una técnica antigua: paredes de mampostería (piedras unidas con mortero) y una estructura principal de madera. Esta estructura de madera es tan fuerte que permite que algunas partes de la casa sobresalgan mucho, aunque esto solo se ve bien desde dentro. Los techos interiores están hechos con vigas y tablas de madera. El tejado también es de madera y tiene dos lados inclinados, con tejas árabes.
El tejado tiene una parte central más alta que forma un espacio grande con desvanes (espacios para guardar cosas), pajares (para guardar paja), trojes (para guardar grano) y un palomar (para palomas). En esta parte alta y central, hay ventanas verticales llamadas buhardillas que dejan entrar la luz. También se ven muchas chimeneas que sobresalen del tejado.
Distribución de los espacios
La casa tiene dos pisos. El piso de abajo estaba destinado a los animales, mientras que el piso de arriba era para las personas. Toda la propiedad tiene una forma rectangular perfecta y está rodeada por los muros de la casa y sus dependencias, además de una tapia alta (un muro) que termina con tejas para protegerla.
El jardín y la cueva secreta
Detrás de la casa, hay un pequeño huerto que ahora es un jardín hundido, con una fuente de piedra. Desde este jardín, se puede entrar a una cueva subterránea que se usaba como bodega y para mantener los alimentos frescos. Más arriba, separado por un muro de piedra, está el corral, que está empedrado con guijarros de río. Desde el corral se ven los balcones y ventanas con rejas del piso principal, las buhardillas del desván y las ventanas a ras de suelo que iluminan la parte baja de la casa.
El interior de la planta baja
La entrada principal de la casa tiene un gran portón de madera con dos hojas y una puerta más pequeña dentro. Este portón lleva a una cuadra muy grande que ocupa dos tercios de la planta baja. El suelo de esta cuadra es muy particular, ya que está hecho con troncos de pino incrustados en la tierra, lo que la hace casi única. Una de las paredes es de piedra y las otras son de mampostería cubierta con yeso. En este espacio se pueden ver las enormes estructuras de madera que sostienen toda la construcción, una técnica que se usaba desde el siglo XVII.