Bernardino de Avellaneda para niños
Bernardino González de Avellaneda y Delgadillo, el primer conde de Castrillo, nació el 18 de octubre de 1544 en Aranda de Duero y falleció en Madrid el 6 de diciembre de 1629. Fue un importante marino, político, y amante de los libros y el arte que sirvió a los reyes Felipe II, Felipe III y Felipe IV de España.
A lo largo de su vida, ocupó cargos muy importantes. Fue capitán general de la Real Armada, presidente de la Casa de Contratación de Indias (una institución que controlaba el comercio con América), asistente de Sevilla, virrey de Navarra y capitán general de Guipúzcoa.
Contenido
- ¿Quién fue la familia de Bernardino?
- ¿Cómo fue la carrera militar de Bernardino?
- ¿Qué cargos de gobierno tuvo Bernardino?
- ¿Qué relación tuvo Bernardino con el descubrimiento de Australia?
- ¿Fue Bernardino un mecenas y coleccionista?
- ¿Cuándo y dónde murió Bernardino?
- ¿Quiénes fueron los hijos de Bernardino?
- Galería de imágenes
¿Quién fue la familia de Bernardino?
Orígenes y herencia familiar
Bernardino nació en una familia noble. Fue el hijo mayor de Juan González de Avellaneda y Delgadillo, señor de varias villas como Valverde y Alcubilla de Avellaneda. Cuando su padre falleció, Bernardino heredó estas propiedades.
Más tarde, en 1590, su tío Juan Delgadillo de Avellaneda murió sin hijos, y Bernardino también heredó los señoríos de Castrillo de Don Juan y Cevico Navero. Sus abuelos fueron otro Bernardino de Avellaneda e Isabel Delgadillo.
Su madre, Francisca de Leiva y Guevara, era hermana de un famoso marino llamado Sancho Martínez de Leiva, conocido como Don Sancho el Famoso. Este tío también fue virrey de Navarra y capitán general de las galeras de Nápoles y de España.
Según un documento escrito por él mismo, Bernardino nació un viernes, 18 de octubre de 1544, a las tres de la tarde. En el mismo documento, describió algunas marcas en su cuerpo, como lunares.
Bernardino tuvo dos hermanos: Sancho, que fue paje del rey Felipe II y murió en una batalla, e Isabel, que se casó con Íñigo de Cárdenas y Zapata.
¿Cómo fue la carrera militar de Bernardino?
Primeros años en la Armada
Cuando tenía solo diez años, Bernardino perdió a su padre. A los trece, comenzó a servir a su tío Sancho Martínez de Leiva, quien era capitán general de las galeras de Nápoles.
En junio de 1563, Bernardino participó en el rescate de Mazalquivir, una ciudad que estaba siendo atacada por los turcos. Después de esta victoria, ayudó en una expedición para limpiar la costa de África de piratas. En esta misión, fue herido. Sin embargo, en 1564, participó en un nuevo ataque que logró tomar el peñón de Vélez de la Gomera.
Más tarde, viajó a Italia y ayudó a movilizar tropas para Córcega, debido a la amenaza turca. También participó en el rescate de La Goleta, una fortaleza española en el norte de África, y trabajó en su fortificación.
En 1566, fue nombrado capitán de la galera principal. En un escrito al rey, contó que en agosto de 1562, su tío lo hizo capitán de su barco. En una ocasión, se encontró con dos barcos enemigos y Bernardino fue el primero en abordarlos con solo unos pocos soldados.
También relató que en el primer intento de tomar el peñón de Vélez de la Gomera, él y unos pocos soldados lograron tomar una torre donde se habían refugiado enemigos. En esa acción, fue herido en un brazo.
Participación en la Rebelión de las Alpujarras
En la Navidad de 1568, Bernardino dejó las galeras y se unió a la represión del levantamiento en las Alpujarras. En mayo de 1569, fue herido en la pierna izquierda por una flecha. En esta guerra, su hermano Sancho falleció.
Después de la muerte de su hermano, su tío y otros familiares le pidieron que se retirara.
Misiones importantes y encuentros reales
Bernardino formó parte del grupo que acompañó a España a la archiduquesa Ana de Austria, quien se casaría con Felipe II. En 1589, el rey Felipe II le encargó el mando de cuatro galeazas de Nápoles, que eran barcos grandes. Dos de estas galeazas habían sobrevivido a la Armada Invencible.
Bernardino contó que un día, mientras estaba con dos galeazas en el río de Lisboa, una de ellas se incendió por descuido. Todos la abandonaron, pero él, con algunos marineros, entró en el fuego y lograron salvar el barco.
Luego, fueron a Bretaña. Bernardino quiso desembarcar y saquear las islas, pero otro capitán no estuvo de acuerdo. Se anclaron cerca de una fortaleza y fueron atacados. Bernardino respondió con sus cañones y logró destruir parte de la fortaleza.
En 1593, se convirtió en caballero de la Orden de Calatrava.
La persecución de Francis Drake
En 1595, Bernardino fue nombrado capitán general de la Armada del Mar Océano. Su misión era ir a las Indias para proteger la flota que regresaría a España y perseguir al corsario Francis Drake, quien había zarpado hacia las Indias con muchos barcos y hombres para atacar Puerto Rico.
Bernardino, al mando de una flota más pequeña y en condiciones no tan buenas, con solo 3000 hombres, derrotó a la flota inglesa en la isla de Pinos el 11 de marzo de 1596. Capturó uno de los barcos enemigos y obligó al resto a huir por el canal de Bahamas. En esta expedición, murieron los famosos piratas Drake y Hawkins.
A principios de octubre, Bernardino llegó a Sanlúcar con toda la flota y uno de los mayores cargamentos de oro y plata de la historia. Él mismo describió la expedición:
Salió de Lisboa con barcos en condiciones desiguales, muchos de ellos sin mantenimiento. Llevaba 3000 hombres, pero muchos marineros y artilleros eran extranjeros. A pesar de las dificultades, no perdió tiempo. Al llegar a Cartagena, tuvo que detenerse para conseguir agua. Sus barcos estaban dañados, especialmente el principal, que tenía una gran abertura. Bernardino decidió seguir adelante, aunque el barco se llenaba de agua y necesitaban bombear constantemente.
Alcanzó al enemigo en la Isla de Pinos. Aunque Drake tenía ventaja, Bernardino lo desafió a la batalla. Drake, al ver que el barco de Bernardino se acercaba, decidió huir, lanzando muchas balas que hirieron a 80 de sus hombres. Bernardino lo persiguió toda la noche, manteniendo su barco cerca del enemigo a pesar de los daños. Drake, por miedo, apagó sus luces y tiró todo lo que llevaba para aligerar los barcos.
Bernardino logró obligar a Drake a salir del canal, que era su objetivo principal. No pudo castigarlo más porque no tenía órdenes, ni barcos adecuados, ni provisiones, especialmente agua. Al obligar al enemigo a huir y asegurar la zona, Bernardino regresó a La Habana para reparar sus barcos y cuidar a su gente. Luego, partió hacia España con un gran cargamento de oro y plata. Durante el viaje, enfrentó un huracán, pero sus barcos no sufrieron daños graves. También tuvo un tiempo difícil cerca de las Bermudas.
Con la gente cansada y enferma, y sin comida, Bernardino contó que un viernes se encontraron con un árbol lleno de peces, lo que les permitió alimentarse hasta casi llegar a España.
También se conserva una historia sobre un envío de cartas muy importante. El rey Felipe II envió 18 barcos para que Bernardino regresara a Puerto Rico, pero la orden era muy difícil de cumplir. Por suerte, Bernardino no se encontró con ninguno de esos barcos hasta ocho días después de haber llegado a puerto.
Cuando iba a las Indias, para evitar ser detectado por corsarios, no hizo una "salva" (un saludo) a un santo. Esto le causó problemas durante ocho días. Al final, decidió hacer una salva general al santo, y poco después, el tiempo mejoró y pudo entrar en el puerto de Sanlúcar con su cargamento y su gente a salvo.
Entre los documentos de Bernardino, hay una carta del rey Felipe II, fechada en Toledo el 25 de julio de 1596, avisándole de la salida de una gran flota inglesa y ordenándole ir a Puerto Rico para organizar la defensa. La carta también decía que recogiera todos los barcos que encontrara con este aviso para que no cayeran en manos enemigas. Esta carta urgente llegó a Bernardino en el río Guadalquivir el 11 de octubre de 1596, llevada por un marino muy experto llamado Pablo de Aramburu, quien hizo el viaje de ida y vuelta en 108 días. Otra carta del rey, anulando la orden anterior y mandándole regresar a España, hizo el viaje de ida y vuelta en solo 60 días.
¿Qué cargos de gobierno tuvo Bernardino?
Presidente y asistente
En mayo de 1598, Bernardino fue nombrado presidente de la Casa de Contratación de Indias. Fue la primera persona con experiencia militar en ocupar este cargo, que antes estaba reservado a abogados. En 1603, también fue nombrado asistente de Sevilla, y ocupó ambos cargos hasta 1609. Durante estos años, preparó y envió muchas flotas, siendo la máxima autoridad política y militar en el reino de Sevilla.
El 23 de enero de 1610, el rey Felipe III le otorgó el título de conde de Castrillo. Ese mismo día, fue nombrado mayordomo mayor del príncipe Manuel Filiberto de Saboya, a quien acompañó dos años después. Desde 1618, fue mayordomo de la princesa Isabel de Borbón, quien más tarde sería la primera esposa de Felipe IV.
Fue consejero de Guerra en 1621 y de Estado en 1629. Desde 1623 hasta su muerte, fue virrey y capitán general de Navarra, y también capitán general de Guipúzcoa.
¿Qué relación tuvo Bernardino con el descubrimiento de Australia?
El 31 de marzo de 1603, Felipe III escribió una carta a Bernardino desde Valladolid. En ella, le recomendaba al Capitán Pedro Fernández de Quirós, un piloto portugués muy experimentado en navegaciones. El rey le pedía a Bernardino que le diera un buen barco para ir a Perú y desde allí, con dos barcos, hacer un descubrimiento de las Islas y Tierras Australes Desconocidas.
El rey también le pidió a Quirós que le hiciera a Bernardino dos instrumentos, uno para conocer la diferencia que la brújula hacía al ir hacia el noreste y otro para medir alturas con más facilidad y precisión.
¿Fue Bernardino un mecenas y coleccionista?
Gracias a los inventarios de su castillo en Castrillo de Don Juan, sabemos mucho sobre las aficiones de Bernardino.
Era un gran amante de los libros. A su muerte, tenía 1653 libros guardados en su biblioteca, muchos de ellos italianos. En 1631, estos libros fueron valorados por un famoso grabador, Juan de Courbes. Se conserva un documento que muestra que Bernardino trajo dos cajas de libros de Italia en 1615, con permiso de la Inquisición.
En un inventario de 1616, se mencionan grandes mapas, incluyendo "una carta de marear grande, muy buena, en pergamino; es universal, hecha por Texera" (un mapamundi de Teixeira). También tenía dos mapas importantes de pergamino, hoy perdidos, uno del Mar del Norte y otro de Canadá. Su biblioteca estaba decorada con retratos al óleo de figuras importantes como Raimundo Lulio, Miguel Ángel, Dante, Petrarca, Tiziano y Rafael.
Además de los libros, en su castillo había más de doscientas pinturas en 1616. Había series de retratos de emperadores romanos y otomanos, reyes y reinas de España y Europa, y grandes soldados del Renacimiento y de la antigüedad, como Antonio de Leyva, Hernán Cortés y Fernando de Magallanes. También tenía unos ciento veinte cuadros religiosos, incluyendo un retrato de la Madre Teresa de Jesús, y muchos bodegones y cuadros de diferentes temas.
Bernardino también se interesaba por la alquimia, como lo demuestran los muchos alambiques y herramientas que tenía. Se conserva un texto escrito por él que describe técnicas para buscar tesoros. También tenía muchos instrumentos de arquitectura, relojes y herramientas de navegación.
Finalmente, tenía una gran colección de armas, incluyendo espadas, ballestas, arcabuces, escopetas, pistolas, cuchillos y armaduras, hechas por los artesanos más famosos del siglo XVI. Algunas de estas armas habían pertenecido a personajes importantes como Enrique VIII de Inglaterra o el Duque de Alba. Incluso conservaba algunos arcos de indios de América.
¿Cuándo y dónde murió Bernardino?
El 25 de marzo de 1629, Felipe IV le dio permiso para organizar sus bienes. Bernardino hizo su testamento en Madrid el 22 de abril de 1629 y falleció el 6 de diciembre de 1629, a los 85 años. Fue enterrado en el Monasterio de San Jerónimo de Espeja, ya que era el patrón de la capilla mayor de la iglesia. Después de su muerte, sus herederos terminaron en 1636 las obras del altar mayor, que tenía un retablo dedicado a la Virgen con seis pinturas de Juan Bautista Maíno.
¿Quiénes fueron los hijos de Bernardino?
Alrededor de 1570, Bernardino se casó con María Vela y Acuña, hija de Blasco Núñez Vela, el primer virrey del Perú. Bernardino enviudó en 1580.
Tuvieron un hijo llamado Juan y dos hijas, Brianda e Isabel, que se hicieron monjas. La hija mayor, Brianda de Acuña (1576-1630), tomó el nombre de Teresa de Jesús al entrar en un convento de carmelitas descalzas en Valladolid. Murió con fama de santidad dos meses después que su padre.
Su hijo Juan de Avellaneda falleció antes que él, en 1614. Juan se había casado con Inés Portocarrero. De ellos, Bernardino tuvo una nieta y sucesora, María Delgadillo de Avellaneda, la segunda condesa de Castrillo. Ella se casó con un hijo de los marqueses del Carpio, quien adoptó el nombre de García de Avellaneda y Haro. Este último fue virrey de Nápoles y ocupó otros cargos importantes.
Galería de imágenes
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Titian - Venus with a Mirror - Google Art Project.jpg
Venus del espejo de Tiziano. Washington, National Gallery.