Ábaco para niños
El ábaco es una herramienta muy antigua que se usa para hacer cálculos. Imagina un marco de madera con barras, y en esas barras hay bolitas que se pueden mover. Con ellas, puedes hacer sumas, restas, multiplicaciones y divisiones. También se usa para enseñar a los niños cómo funcionan los números.
Contenido
¿De dónde viene la palabra "ábaco"?
La palabra "ábaco" se usa en muchos idiomas y tiene varios posibles orígenes. En latín, se decía abăcus. En griego, era abax o abakos, que significan "superficie plana" o "tabla".
También se cree que podría venir de una palabra fenicia que significa "polvo" o "granos". Antiguamente, se usaban semillas, palitos o piedritas para contar, y a esas piedritas se les llamaba "calculi" en latín, de ahí viene la palabra "cálculo".
El ábaco tiene diferentes nombres en otros idiomas:
- En chino: Suan Pan
- En japonés: Soroban
- En coreano: Tschu Pan
- En ruso: Schoty
- En náhuatl: nepohualtzintzin
¿Qué es y cómo funciona el ábaco?
El ábaco es un instrumento que usa cuentas que se deslizan por alambres o barras. Cada alambre representa un valor: unidades, decenas, centenas, y así sucesivamente. Fue inventado en Asia Menor y se considera el antecesor de las calculadoras modernas.
Los comerciantes lo usaron mucho en la Edad Media en Europa y el mundo árabe. Poco a poco, fue reemplazado por los números que usamos hoy (los números indo-arábigos). Aunque en Europa ya no se usa tanto, sigue siendo popular en lugares como China, Japón, Corea y Rusia.
Historia y origen del ábaco
El ábaco es uno de los instrumentos de cálculo más antiguos. Se cree que apareció entre el año 1000 a.C. y el 500 a.C. Al principio, la gente usaba superficies planas con líneas dibujadas en el polvo y movían piedras sobre ellas para contar.
Hoy en día, muchos piensan que el ábaco se originó en China, donde todavía se usa mucho, al igual que en Japón. Otros creen que pudo haber surgido en el desierto del Sahara, donde se usaban tableros rayados en la arena para calcular y jugar.
Un famoso matemático italiano, Leonardo de Pisa Fibbonacci, escribió un libro llamado Liber abaci en el siglo XIII. En este libro, hablaba sobre cómo usar los números indo-arábigos, pero el ábaco era tan importante que su nombre se asoció con la aritmética.
Se han encontrado pruebas del uso del ábaco en escritos de antiguos griegos. Por ejemplo, Demóstenes (384-322 a.C.) mencionó la necesidad de usar piedras para cálculos difíciles. Heródoto (484-425 a.C.) notó que los egipcios movían sus manos de derecha a izquierda al calcular, mientras que los griegos lo hacían de izquierda a derecha.
También se han hallado evidencias físicas en excavaciones arqueológicas. En 1851, se encontró un jarrón llamado Vaso de Darío con un dibujo de alguien haciendo cálculos con cuentas. En 1846, se descubrió un tablero de mármol en la isla de Salamina, que se cree que fue usado en Babilonia alrededor del 300 a.C. Los romanos usaban piedras de caliza o mármol, llamadas calculi, para sus ábacos, de ahí viene la palabra "cálculo".
El ábaco en Europa
En el siglo XIII, en China, se popularizó una mesa de ábaco. En Europa, hubo intentos de mejorar el ábaco. El filósofo romano Boecio escribió sobre un ábaco donde una sola cuenta podía representar un número del 1 al 9. Más tarde, el monje Gerbert de Avrillac (quien luego fue el Papa Silvestre II) también propuso una nueva forma de ábaco. Sin embargo, ninguna de estas ideas se hizo muy popular.
La mesa de ábaco se usó mucho en Bretaña. Un libro de 1542, The Ground of Arts de Robert Recorde, explicaba cómo usarla. Pero a medida que los números indo-arábigos se extendieron por Europa, el uso del ábaco fue desapareciendo.
El ábaco ruso
El ábaco ruso, llamado schëty (Счёты), suele tener una sola cubierta inclinada. La mayoría de sus alambres tienen diez cuentas, pero uno tiene cuatro cuentas para fracciones de rublo. Los modelos más antiguos tenían otro alambre para fracciones de kopek. El ábaco ruso se usa a menudo en posición vertical. Para que sea más fácil ver, las cuentas del medio (la 5ª y 6ª) suelen ser de un color diferente.
El ábaco en Asia
China
En China, las primeras pruebas del ábaco se encontraron en cuentas de cerámica de hace más de 3000 años. El libro más antiguo que habla sobre el cálculo con ábaco es la Crónica Aritmética, escrito por Xu Yue hace 2000 años. Este ábaco tenía una cuenta arriba y cuatro abajo.
Los ábacos modernos ya existían en la dinastía Song (960 d.C.-1279 d.C.). El ábaco chino más conocido es el Suanpan. Durante la dinastía Yuan (1279-1368), el ábaco se hizo muy popular en todo el país. A mediados de la dinastía Ming (1368-1644), su uso ya era común y se desarrollaron técnicas completas para usarlo.
Dos libros importantes de la dinastía Ming que ayudaron a extender el uso del ábaco fueron Principios matemáticos (1524) de Wang Wensu y Reglas generales del método de conteo (1592) de Cheng Dawei. Durante este período, el ábaco chino llegó a Corea en el año 1400 y a Japón en el 1600, así como al sudeste de Asia.
Al principio, el ábaco chino tenía una cuenta arriba y cinco abajo. Después de la dinastía Qing (1644-1912), el modelo más usado hasta hoy tiene dos cuentas arriba y cinco abajo. El ábaco japonés, llamado Soroban, se diseñó con una cuenta arriba y cuatro abajo.
El ábaco en América
El Imperio Inca usaba una forma diferente de ábaco llamada quipus. Eran cuerdas con nudos de diferentes maneras que servían para registrar cantidades y transmitir mensajes. Los quipus eran un sistema de comunicación muy avanzado.
Los mexicas (aztecas) también inventaron el nepohualtzintzin, un ábaco hecho de madera, hilos y granos de maíz. Era conocido como la "computadora azteca" y se usaba para hacer operaciones rápidas. Su uso disminuyó después de la llegada de los españoles en 1521.
El ábaco hoy en día
Aunque tenemos calculadoras y computadoras, el ábaco sigue siendo una herramienta poderosa. Un ejemplo sorprendente ocurrió el 12 de noviembre de 1946 en Tokio. Kiyoshi Matsuzaki, de Japón, usó un ábaco japonés y le ganó a Thomas Nathan Wood, de Estados Unidos, que usaba una calculadora electromecánica. Matsuzaki ganó en cuatro de las cinco pruebas, solo perdió en las multiplicaciones.
En 1996, científicos de IBM en Suiza construyeron un ábaco muy especial. Usaron moléculas como cuentas, ¡tan pequeñas que son menos de una millonésima parte de un milímetro! Para mover estas cuentas moleculares, usaron un microscopio especial.
Más información
- Regletas de Cuisenaire
- Soroban
- Suanpan
- Ábaco neperiano
- Nepohualtzintzin
Véase también
En inglés: Abacus Facts for Kids