Test psicológico para niños
Un test psicológico o prueba psicológica es una herramienta especial que se usa para medir o entender una característica específica de la mente de una persona. También puede ayudar a conocer los rasgos generales de su forma de ser. La idea es que las respuestas de una persona a estas pruebas se pueden comparar con las de otras personas. Esto ayuda a clasificar o entender mejor cómo funciona cada individuo.
La forma en que se crea un test busca que las respuestas de una persona muestren cómo se comporta en situaciones de la vida diaria. Así, el test puede evaluar de forma precisa la habilidad que quiere medir.
Contenido
Tipos de Tests Psicológicos
¿Cómo se clasifican los tests psicológicos?
Los tests psicológicos se dividen principalmente en dos grandes grupos:
- Tests psicométricos: Estos tests se basan en la idea de que las personas responden con sinceridad. Miden y asignan un valor a una cualidad o proceso mental. Por ejemplo, pueden medir la inteligencia, la memoria, la atención o la capacidad de entender. Se usan para evaluar, seleccionar personas o ayudar en diagnósticos. Su forma de aplicarse, corregirse e interpretarse suele ser muy organizada y estándar.
Algunos ejemplos importantes de tests psicométricos son:
- Test de Dominós: Creado por Edgar Anstey. Mide la inteligencia general y la capacidad de reconocer semejanzas y diferencias. Se puede aplicar a una persona o a un grupo.
- Test de Matrices Progresivas de Raven: Creado por J. C. Raven y Charles Spearmann. Mide la inteligencia y la capacidad de razonar comparando formas.
- Test de Aptitudes Diferenciales (DAT): Creado por George K. Bennett, Harold G. Seashore y Alexander G. Wesman. Evalúa el razonamiento verbal, numérico, abstracto y mecánico. También mide la capacidad espacial, la ortografía y la rapidez visual.
- Cuestionario de los 16 factores de personalidad: Creado por R. B. Cattell. Evalúa la personalidad a través de 16 escalas principales y 5 dimensiones secundarias. Se usa con adolescentes y adultos.
- Inventario Multifásico de la Personalidad de Minnesota (MMPI): Creado por Starke Hathaway y J. C. McKinley. Mide diferentes aspectos de la personalidad.
- Tests proyectivos: Estos tests se basan en la idea de que cada persona responde de forma única. A través de sus respuestas, se pueden conocer rasgos de su personalidad. Las respuestas pueden ser dibujos (como en el Test de Bender o el HTP) o historias (como en el T.A.T. o el Test de Rorschach). Se usan más en el ámbito clínico, legal y con niños. Su objetivo es explorar la personalidad en profundidad, incluyendo aspectos que la persona no conoce de sí misma.
Los tests proyectivos se clasifican en 5 grupos:
- Técnicas estructurales: Usan imágenes poco definidas que la persona debe organizar y decir qué ve.
- Test de Rorschach: Consiste en diez láminas con manchas de tinta. La persona dice lo que ve en ellas. Se usa para evaluar aspectos profundos de la personalidad en jóvenes y adultos.
- Técnicas temáticas: Usan imágenes con personas o situaciones. La persona debe inventar una historia sobre lo que ve.
- Test de Percepción Temática (CAT): Usa tarjetas con dibujos de animales que evocan situaciones. Se aplica a niños de 3 a 10 años. Ayuda a evaluar impulsos, emociones y sentimientos.
- Técnicas expresivas: Se pide a la persona que dibuje una o varias figuras.
- Test de la Figura Humana de Karen Machover: El dibujo de una figura humana ayuda a entender cómo se ve la persona a sí misma. Se usa con jóvenes y adultos.
- Test del dibujo de la familia: Permite conocer cómo se adapta el niño a su familia y si hay conflictos. Se aplica a partir de los 5 años.
- El test del árbol: Analiza el dibujo de un árbol para identificar cómo se adapta la persona y rasgos de su personalidad. Se aplica a partir de los 5 años.
- H-T-P (Casa, Árbol y Persona): Al dibujar una casa, un árbol y una persona, se busca entender cómo se ve la persona, cómo maneja sus emociones y su situación familiar. Se usa con niños, adolescentes y adultos.
- Técnicas constructivas: La persona debe organizar piezas específicas siguiendo instrucciones.
- Test del pueblo: La persona organiza piezas que representan edificios de un pueblo para construirlo.
- Técnicas asociativas: Se pide a la persona que diga lo primero que se le viene a la mente al escuchar palabras, frases o historias cortas.
- Las Fábulas de Düss: Ayuda a identificar conflictos internos que pueden explicar comportamientos. Se aplica a partir de los 3 años.
¿Quién puede aplicar los tests psicológicos?
El uso de los tests psicológicos está generalmente reservado para profesionales de la psicología. Sin embargo, hay una clasificación para regular quién puede usarlos:
- Tests de Nivel I: Pueden ser aplicados y corregidos por otros profesionales (como educadores o médicos) después de recibir entrenamiento de un psicólogo. Un ejemplo son las pruebas de evaluación de conocimientos en las escuelas.
- Tests de Nivel II: Pueden ser aplicados por profesionales no psicólogos, pero la corrección e interpretación debe hacerla un psicólogo. Por ejemplo, los dibujos que hacen los niños en la escuela.
- Tests de Nivel III: Solo pueden ser aplicados, corregidos e interpretados por un psicólogo capacitado. Son los tests más complejos y relevantes. Incluyen pruebas como las Escalas de Wechsler (WAIS, WISC y WPPSI) o el Test de Rorschach.
Algunos países también clasifican los tests según la preparación que necesita el profesional para usarlos:
- Nivel A: Tests de rendimiento y conocimientos.
- Nivel B: Tests grupales de habilidades e inteligencia. Requieren conocimientos sobre la teoría de los tests y métodos estadísticos.
- Nivel C: Tests individuales de inteligencia, personalidad y otros instrumentos complejos. Requieren un título universitario en Psicología y experiencia.
¿Para qué se usan los tests psicológicos?
Los tests psicológicos se usan en diferentes áreas para entender mejor a las personas. Un psicólogo no solo corrige los resultados, sino que los interpreta usando todos sus conocimientos. Así, puede crear un perfil completo y útil sobre cómo funciona una persona en diferentes situaciones.
- En la psicología clínica: Los tests ayudan a los psicólogos a obtener mucha información de una persona en poco tiempo. Permiten entender cómo funciona el paciente en ciertas áreas, lo que ayuda a identificar situaciones y a planificar cómo ayudarlo.
- En la psicología educativa y orientación vocacional: En esta área, los tests evalúan de forma organizada los procesos de aprendizaje en niños, adolescentes y adultos. También son muy importantes para ayudar a elegir una carrera o profesión. Permiten ver las habilidades y preferencias que una persona tiene, pero que quizás aún no ha descubierto por sí misma.
- En la psicología organizacional y laboral: En el ámbito del trabajo, los tests permiten obtener mucha información rápidamente. Ayudan a identificar actitudes, fortalezas y debilidades de los candidatos para un puesto. También se usan para evaluar el desempeño del personal.
Beneficios de los tests en el trabajo
Los tests psicológicos en el ámbito laboral dan a las empresas información importante y confiable sobre los candidatos. Ofrecen una imagen real de las personas que buscan empleo. Estos tests añaden un nivel de objetividad a las formas tradicionales de contratar. Por eso, son una parte muy importante en la estrategia de contratación, ya que complementan otros procesos de selección.