Mariano Delgrás para niños
Mariano Delgrás Rivas fue un destacado médico y académico español que vivió entre 1797 y 1855. También fue elegido diputado, lo que significa que representó a su provincia en el parlamento de España durante el reinado de la Reina Isabel II.
¿Quién fue Mariano Delgrás Rivas?
Mariano Delgrás Rivas nació alrededor de 1797 o 1798 en un pueblo de la provincia de Guadalajara, en España. Algunos historiadores creen que su pueblo natal fue Escamilla. Desde joven, mostró interés por el conocimiento y estudió Filosofía y Medicina en la famosa Universidad de Alcalá de Henares.
Sus primeros años y estudios
Después de completar sus estudios, Mariano Delgrás Rivas se convirtió en un miembro activo de la comunidad científica y médica de su tiempo. Fue parte de la Academia Médico-Quirúrgica, una institución importante para los profesionales de la medicina y la cirugía. También fue uno de los primeros miembros de la Real Academia de Ciencias Naturales, que se fundó en 1834. Esta academia fue el origen de la actual Real Academia de Ciencias Exactas, Físicas y Naturales, que se creó más tarde, en 1847.
Su importante labor en la medicina
Además de su trabajo como médico, Mariano Delgrás Rivas tuvo un papel muy importante en la difusión del conocimiento médico. Fue el fundador y director del Boletín de Medicina, Cirugía y Farmacia, una publicación donde se compartían los avances y descubrimientos en estas áreas. También colaboró como redactor en El Siglo Médico, otra revista clave para los profesionales de la salud de la época.
Su participación en la política
En 1843, Mariano Delgrás Rivas fue elegido diputado por la provincia de Guadalajara. Esto significaba que representaba a los ciudadanos de su provincia en las Cortes, que es el parlamento de España. Desde allí, podía participar en la creación de leyes y en las decisiones importantes para el país, durante el tiempo en que la Reina Isabel II gobernaba.
Reconocimientos y legado
Mariano Delgrás Rivas no solo se dedicó a la medicina y la política, sino que también se preocupó por el bienestar de las personas. Creó una Sociedad de Socorros Mutuos, que era una organización donde las personas se ayudaban entre sí en momentos de necesidad. Por su valioso trabajo y contribuciones, fue reconocido con la cruz de comendador de la Orden de Isabel la Católica, un importante honor en España. Falleció en el año 1855, dejando un legado de servicio y conocimiento.