Francisco Quesádez para niños
Francisco Quesádez fue un artista español que vivió entre los años 1663 y 1701. Se dedicó a la pintura y, sobre todo, al grabado, una técnica para hacer dibujos en metal que luego se imprimen en papel. Trabajó principalmente en la ciudad de Valencia.
Quesádez fue un grabador muy productivo. Usaba una técnica llamada buril, que consiste en tallar líneas en una placa de metal con una herramienta afilada. A veces también usaba el aguafuerte, que emplea ácidos para crear el dibujo. Sus grabados no siempre eran perfectos, pero eran muy solicitados. Trabajó mucho para libreros de Valencia, como Jerónimo Vilagrasa, creando portadas de libros y retratos.
Contenido
Primeros Trabajos y Colaboraciones
En 1663, Francisco Quesádez ya firmaba algunos de sus grabados. Estos se usaron para ilustrar un libro de Juan Bautista Valda llamado Solenes fiestas que celebró Valencia a la Inmaculada Concepción de la Virgen María. Este libro fue impreso por Jerónimo Vilagrasa.
Celebraciones de la Inmaculada Concepción
Este libro es uno de los más ricos en grabados de la época en Valencia. Quesádez colaboró con otros artistas como José Caudí, Mariano Gimeno y Juan Felipe. Juntos, crearon cincuenta grabados que mostraban los altares y carros especiales que se hicieron para celebrar una decisión del Papa Alejandro VII. El Papa había aprobado el culto a la Inmaculada Concepción y la celebración de su fiesta en 1661, lo que causó mucha alegría en España.
Dos años después, en 1665, el Papa Alejandro VII hizo un nuevo decreto para que la fiesta de la Inmaculada fuera obligatoria en España. Esto llevó a más celebraciones en Valencia y a la publicación de otro libro, Luzes de la aurora, escrito por Francisco de la Torre y Sevil y también impreso por Jerónimo Vilagrasa. La contribución de Quesádez en esta ocasión fue el grabado de la portada, que es una de sus obras más conocidas, y un retrato del marqués de Astorga.
Grabados para Eventos Importantes
En 1666, Quesádez grabó un dibujo de José Caudí que mostraba el monumento funerario que se levantó en Valencia para el funeral del rey Felipe IV. Esta lámina se incluyó en un libro que describía las ceremonias.
Portadas de Libros y Temas Religiosos
Entre las portadas de libros que Quesádez grabó, destaca la del libro de Vicente Carbonell, Célebre centuria, de 1672. También se cree que hizo la portada de La cándida flor del Turia San Pedro Pasqual de Valencia de Baltasar Sapena, de 1671, donde aparece una imagen del santo en prisión.
Historias y Leyendas en Grabados
Un grabado muy interesante es el que hizo para el libro de Juan Bautista Ballester, Identidad de la imagen del S. Christo de S. Salvador de Valencia, de 1672. Este grabado muestra el altar del Cristo de Berito de la iglesia del Salvador en Valencia. La leyenda cuenta que la talla del Crucificado llegó milagrosamente a la ciudad por el río, después de haber sido maltratada en Tierra Santa.
También grabó un retrato de la monja Hipólita de Jesús, que se publicó en 1679 y luego en sus obras completas en 1683.
Otros Trabajos y Pinturas
Además de portadas y retratos, Quesádez también hizo escudos de familias importantes y estampas religiosas sueltas, como una de San Vicente Ferrer con una vista de la ciudad de Valencia.
Como pintor, no se conocen muchas obras suyas. Solo se sabe de un cuadro al óleo de una colección privada, San Antonio de Padua y el milagro del pie reinjertado, fechado en 1669 y firmado con letras griegas. También se conoce un San Antonio de Padua con el Niño Jesús en el reverso de una placa de cobre que tenía un escudo grabado.
