Fernando de Berrío para niños
Fernando de la Hoz Berrío y Oruña (nacido en Berja, Almería, en 1577 y fallecido en Argel en 1622) fue un importante explorador y gobernador español durante la época colonial en América. Dirigió más de veinte expediciones en busca de la legendaria ciudad de El Dorado.
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¿Quién fue Fernando de la Hoz Berrío y Oruña?
Fernando de la Hoz Berrío y Oruña fue hijo de Antonio de Berrío, quien también fue un explorador y gobernador. Su madre, María de Oruña, era sobrina de Gonzalo Jiménez de Quesada, un famoso adelantado y abogado. Fernando tenía dos hermanos: Francisco de la Hoz Berrío y Oruña, que fue gobernador de la provincia de Venezuela, y Antonia María de la Hoz Berrío y Oruña.
La familia Berrío en el Nuevo Mundo
En 1580, la familia Berrío se mudó al Nuevo Mundo. En Santa Fe de Bogotá, la Real Audiencia (un tribunal importante de la época) reconoció sus derechos sobre la herencia de Gonzalo Jiménez de Quesada. La familia se estableció en Tunja y Chita. Desde joven, Fernando acompañó a su padre en varias expediciones. Al igual que su padre, se dedicó con gran entusiasmo a la búsqueda de El Dorado, una aventura en la que también compitió con el explorador inglés Walter Raleigh.
La búsqueda de El Dorado
La misión de encontrar El Dorado fue un encargo que venía de Gonzalo Jiménez de Quesada, como parte de su legado. Fernando de la Hoz Berrío continuó el trabajo de su padre en la misma región que él había explorado: el macizo de Guayana. Allí, Fernando dirigió más de veinte expediciones. Algunos creen que fue el primer europeo en ver el Salto Ángel, la cascada más alta del mundo, con 979 metros de altura.
Gobernador de Guayana
En 1597, tras la muerte de su padre, Fernando recibió el cargo de gobernador de la provincia de Guayana, ubicada en el este de Venezuela. Esta provincia dependía del Virreinato de Nueva España. En 1598, Fernando se encargó de refundar la ciudad de Santo Tomé de Guayana, que hoy conocemos como Ciudad Bolívar.
La intensa búsqueda de El Dorado le causó grandes pérdidas económicas. Para recuperarse, permitió el comercio con comerciantes ingleses y holandeses, especialmente de tabaco. Esta decisión fue muy discutida y fue denunciada. El Consejo de Indias, una institución importante de España, propuso al rey que lo reemplazaran por Sancho de Alquiza, quien había sido gobernador de la provincia de Venezuela.
Desafíos y regreso al poder
En 1612, Fernando perdió temporalmente su cargo de gobernador después de un juicio. Sancho de Alquiza asumió como gobernador interino. Fernando no estuvo de acuerdo y viajó a España para explicar su situación ante la Corte. Lo logró, pero para entonces, Sancho de Alquiza ya había terminado su mandato y había sido reemplazado por Diego Palomeque de Acuña. Para recuperar su puesto de por vida, Fernando debía esperar a que Palomeque de Acuña terminara su período de cuatro años.
Palomeque de Acuña tomó posesión el 8 de noviembre de 1615. Lamentablemente, Palomeque murió en un combate contra las fuerzas de Raleigh, que destruyeron Santo Tomé de Guayana en 1617. Después de su muerte, Juan de Lezama y luego Jerónimo de Grados se hicieron cargo del gobierno hasta que Fernando de la Hoz Berrío pudo regresar.
Reconstrucción y últimos años
El 11 de marzo de 1619, Fernando de la Hoz Berrío llegó a la destruida Santo Tomé de Guayana con 44 soldados y los documentos que le otorgaba la Real Audiencia de Santa Fe. Esto ocurrió pocos meses después de la muerte de Raleigh en 1618.
Su primera tarea fue reconstruir Santo Tomé en un lugar más fácil de defender y adecuado para el cultivo de tabaco, cerca de Chirica. Para ello, encargó a los capitanes Jerónimo de Grados y Alonso de Monteros que buscaran ayuda de los pueblos indígenas en el río Esequibo. Sin embargo, fueron capturados por los ingleses, quienes pidieron tabaco a cambio de su libertad.
Fernando de la Hoz Berrío logró reconstruir la ciudad, reactivar la agricultura y el comercio. También tenía planes de expandir y explorar más territorios. Quería presentar estos proyectos al Consejo de Indias en España para conseguir más recursos y personal. Durante su gobierno, se esforzó mucho por mantener el control español en esa parte del Caribe, lo que lo llevó a enfrentarse a otras naciones europeas, a los pueblos indígenas y a funcionarios de la administración colonial.
Cuando viajaba a España para conseguir sus objetivos, fue capturado por piratas y llevado a Argel, donde falleció a causa de una enfermedad en 1622.