Alometría para niños
En biología, la alometría es un concepto que explica cómo las diferentes partes del cuerpo de un ser vivo cambian de tamaño de forma relacionada con el tamaño total del organismo. Imagina que, a medida que creces, tus brazos y piernas se hacen más largos, pero tu nariz no crece tan rápido. Eso es alometría: las proporciones de tu cuerpo cambian a medida que te desarrollas.
El término "alometría" fue creado por los científicos Julian Huxley y Georges Mikataudze en 1933.
Un buen ejemplo de alometría en el crecimiento es el desarrollo humano. Cuando eres un bebé, tu cabeza es grande en proporción a tu cuerpo, y tus brazos y piernas son más cortos. A medida que creces, tus brazos y piernas se alargan mucho más rápido que otras partes, como tu cabeza o tu nariz. Por eso, las proporciones de un niño son muy diferentes a las de un adulto.
Otro ejemplo interesante es el cangrejo violinista (Uca pugnax). Los machos jóvenes tienen dos pinzas del mismo tamaño. Pero a medida que crecen, una de las pinzas empieza a crecer mucho más rápido que la otra. Esta pinza gigante puede llegar a pesar casi el 38% del peso total del cangrejo. Esto significa que la pinza más grande aumenta su masa seis veces más rápido que el resto del cuerpo. ¡Es un cambio de proporción impresionante!
Contenido
¿Qué tipos de alometría existen?
El científico Stephen Jay Gould (en 1966) identificó cuatro tipos principales de alometría, que nos ayudan a entender cómo ocurren estos cambios de tamaño y forma:
- La alometría ontogenética se refiere a cómo las partes del cuerpo crecen de forma diferente en un mismo individuo a lo largo de su vida, desde que nace hasta que es adulto.
- La alometría filogenética se observa cuando comparamos las tasas de crecimiento de diferentes partes del cuerpo en grupos de seres vivos que están relacionados evolutivamente.
- La alometría intraespecífica se refiere a las diferencias de proporciones entre los individuos adultos de una misma especie o población.
- La alometría interespecífica compara este fenómeno entre diferentes especies que están relacionadas entre sí.
Las relaciones alométricas se pueden describir con una fórmula matemática. Si el crecimiento de una parte del cuerpo es proporcional al crecimiento del cuerpo entero (es decir, las proporciones se mantienen), se dice que hay isometría. Pero si una parte crece desproporcionadamente más rápido, hablamos de alometría positiva. Si crece desproporcionadamente más lento, es alometría negativa. La alometría siempre implica un cambio en la forma del organismo.
¿Cómo la modularidad permite la alometría?
La alometría puede causar cambios importantes en el desarrollo de los organismos. Esto es posible gracias a algo llamado "modularidad". Los "módulos" son como pequeñas unidades o bloques de construcción que forman un organismo, tanto en su etapa de embrión como cuando es adulto.
Estos módulos interactúan entre sí y se diferencian, lo que permite que un organismo se desarrolle. La modularidad es clave porque permite que la alometría cambie un módulo específico sin afectar el desarrollo o el funcionamiento de los demás. Por ejemplo, en el desarrollo, los módulos pueden ser grupos de células que forman un órgano o incluso regiones que controlan la actividad de los genes.
¿Cómo la alometría influye en la evolución?
Los cambios en estos módulos pueden ocurrir en el espacio (dónde se desarrollan) o en el tiempo (cuándo se desarrollan). La existencia de módulos en los embriones y en los organismos adultos ha permitido que los cambios alométricos en el crecimiento generen "novedades evolutivas". Esto significa que, a través de un crecimiento diferencial, pueden surgir diferentes formas corporales dentro de un mismo grupo de animales.
Un ejemplo fascinante es el desarrollo de las ballenas. Las ballenas jóvenes tienen un cráneo similar al de otros mamíferos, con la nariz en la parte delantera. Sin embargo, a medida que crecen, los huesos de su mandíbula superior (premaxilar y maxilar) crecen muchísimo. Este crecimiento alométrico hace que la nariz se desplace hacia la parte superior del cráneo. Así es como se forma el "agujero de soplido" que las ballenas usan para respirar cuando están cerca de la superficie del agua.
Los cambios alométricos también pueden generar nuevas características evolutivas a partir de la acumulación de pequeños cambios en los módulos. Estos cambios, con el tiempo, pueden cruzar un límite y producir algo completamente nuevo.
¿Cómo funciona la alometría en las plantas?
Las plantas tienen una capacidad especial para crecer de forma continua y para reemplazar partes dañadas. En las plantas multicelulares, los cambios en la forma, el tamaño y la estructura son muy comunes durante su desarrollo. Esto les permite crecer sin parar, añadiendo nuevos órganos y tejidos periódicamente.
Por esta razón, la modularidad es muy importante para las plantas. Cada módulo (como una hoja o una rama) experimenta un crecimiento alométrico hasta que alcanza su forma y función madura. Esto les da muchas ventajas, ya que las plantas dependen mucho de su entorno. La capacidad de modificar el crecimiento de sus módulos según las condiciones ambientales les permite adaptar la función de una parte o de un órgano completo a una nueva situación. Por ejemplo, una misma planta puede tener hojas de diferentes formas para captar mejor la luz o para protegerse de la sombra.
¿Cómo se usa la alometría para medir la inteligencia animal?
Una forma de intentar medir la inteligencia de los animales es usando el "cociente de encefalización". Para calcularlo, se compara la masa del cerebro de un animal con la masa total de su cuerpo. Se ha observado una relación alométrica clara: cuanto más pequeño es un animal, mayor es la proporción de su cerebro en relación con su masa corporal total.
Véase también
En inglés: Allometry Facts for Kids
- Constricción (biología)